
Factoraje
El factoraje es una herramienta que utilizan las empresas para obtener liquidez, es decir, una empresa que está vendiendo continuamente sus productos y servicios, documenta esa venta a través de una factura en la que financia a su cliente y se guarda el derecho de cobrar por esa factura que está financiando.
Esta empresa que factura a crédito sus productos o servicios se puede acercar con una entidad financiera descontar o vender los derechos de cobro de esa factura y a cambio la institución financiera le dará liquidez.
Esto proceso implica a tres participantes en la operación el que vendió a crédito, que cede los derechos de cobro, una institución que compra los derechos que llamaremos el factor o institución financiera y alguien que tiene la obligación de pagar esta factura del servicio o producto y que llamaremos deudor.
Existen dos formas de factoraje, con recurso y sin recursos (true sale).
El caso del factoraje sin recurso es una la venta real de la factura en la que quien vende entrega la mercancía y factura al recibir un pago y cede totalmente los derechos de cobro. La empresa que anticipa el dinero, es decir, el factor se queda con una única fuente de pago.
En el caso del factoraje con recurso, la institución que vende la factura registra como deuda este anticipo y mantiene la contingencia de tener que devolverlo en caso de que la empresa que compró en este caso el deudor no pague.
Estos esquemas de financiamiento ayudan a la empresa en sus activos operativos, como pueden ser las cuentas por cobrar.